Orlando Augusto Hurtado Lara nació un 2 de mayo de 1978 en la ciudad de Barquisimeto estado Lara, en medio de una familia numerosa donde su nacimiento completó un grupo de cinco hermanos, 2 hembras y tres varones. Es el hijo menor de Miriam Violeta Lara de Hurtado, natural de Quíbor estado Lara y de Orlando Antonio Hurtado Rivas, llanero oriundo de San Fernando de Apure.
Sus hermanos Yndira del Valle, Yuraima Coromoto, Orlando Antonio y Orlando José crecieron junto a él en un ambiente que combinaba la atmósfera urbana con el paisaje provinciano debido a que su familia se mudó a la ciudad de Maracay cuando Orlando Augusto tenía apenas 4 años, alternando su estadía en el estado Aragua con viajes constantes al estado Barinas donde su padre tenía la finca familiar.
Es esa combinación entre el campo y la ciudad lo que lo hizo crecer con una visión muy amplia de la vida, mezclando la cultura llanera, con la urbana y la larense. Fue criado en una familia profundamente unida, donde los valores inculcados redundaban en el amor, la honestidad y el trabajo, así como un intenso cariño por la cultura venezolana. Su familia materna contribuyó musicalmente en su formación artística, ya que uno de sus tíos, José Antonio Lara “El Catire”, en todas las reuniones familiares tocaba el cuatro y cantaba junto a su madre y el resto de sus tíos valses, boleros y pasajes.
Con doce años Orlando Augusto aprendió a tocar el instrumento nacional, el cual se convertiría en su inseparable compañero. En este sentido tuvo fuerte influencia artística, tanto musicalmente como en la composición de sus letras, del cantautor Reynaldo Armas, así como de otros tantos cantantes llaneros populares durante su etapa adolescente.
Por otra parte, en la finca familiar entre Dolores y Libertad de Barinas, a orillas del río Masparro, cada noche de las vacaciones en las que iba con sus hermanos al llano barinés, se tejían entre las hamacas donde dormían todos los integrantes de la familia, poemas que dirigía magistralmente su padre. La ausencia de la luz eléctrica en esas largas noches llaneras, hacía que esas dinámicas se extendieran por largas horas, donde su padre iba enseñando los versos de Ernesto Luís Rodríguez, Pérez Bonalde, Alberto Arvelo Torrealba y otros tantos poetas a cada uno de sus hijos. Allí se iba sembrando en el alma de Orlando Augusto el amor por la poesía tradicional venezolana.
Así pues en las reuniones familiares, tanto maternas como paternas, los hermanos Hurtado Lara declamaban los versos aprendidos en las tertulias íntimas en la finca familiar. A la edad de 17 años, Orlando Augusto sufre la pérdida de su papá, principal mentor de su vida, lo que hace más intenso su amor por la poesía debido a su deseo de continuar con las enseñanzas de su padre. Así pues, ese mismo año nacen sus primeros poemas cargados de todas las vivencias antes descritas y que siguieron apareciendo de manera prolífica cada año de su vida.Este joven poeta, cursa estudios superiores en la Universidad Bicentenaria de Aragua en la ciudad de Maracay y obtiene el título de licenciado en Comunicación Social. De inmediato comienza su carrera como excelente periodista teniendo sus primeros trabajos en la ciudad de Maracay como también en dos regiones llaneras: El Alto Apure y el estado Guárico. Durante todos esos años de juventud Orlando Augusto siguió escribiendo poemas y canciones con tres temas fundamentales en sus composiciones: El llano, el amor y la patria.
A la edad de 28 años contrajo matrimonio
con la también periodista Lisbeth Guzmán con quien poco tiempo después tuvo una hermosa niña llamada Paola Violeta Hurtado Guzmán. Actualmente, Orlando Augusto Hurtado Lara, está inscrito en la Sociedad de Autores y Compositores de Venezuela (SACVEN) bajo el número 6295 con más de 350 composiciones registradas, algunas convertidas en canciones y publicadas por cantantes de música llanera como Carlos Gustavo Solórzano. Asimismo, continúa su trabajo periodístico combinado con la composición de poemas y canciones, así como con la producción artística y edición de un medio de comunicación impreso, como lo es la revista “Kirpa”, publicación dedicada a la difusión de la cultura llanera. (Lisbeth Guzmán)
|